Los desintegradores se emplean en situaciones donde la tecnología de trituración convencional no es suficiente. Son capaces de reducir una amplia gama de materiales a partículas o gránulos extremadamente pequeños. Esta tecnología cumple con los más estrictos requisitos de seguridad para usuarios industriales, agencias gubernamentales y empresas de impresión de billetes, ofreciendo un alto rendimiento. Las pantallas de cambio rápido proporcionan una flexibilidad óptima, permitiendo ajustar el nivel de seguridad de P3 a P7 de manera inmediata. Entre los clientes de larga data se encuentran bancos centrales, impresoras de seguridad, servicios de inteligencia, el ejército y otras agencias gubernamentales en todo el mundo, así como empresas de la industria y el sector de gestión de residuos.
Los desintegradores están equipados con un rotor sólido que cuenta con cuchillas atornilladas, las cuales son fácilmente reafilables y están fabricadas en acero de alta calidad. El material a destruir se introduce en la cámara de trituración desde la parte superior a través de una tolva, donde es cortado de manera similar a unas tijeras entre las cuchillas del rotor en movimiento rápido y las cuchillas del estator, que permanecen fijas en la carcasa. Debido a que el corte produce partículas de formas y tamaños indefinidos, se utiliza una pantalla debajo del rotor para garantizar que solo las partículas de un tamaño específico salgan de la máquina.
Las partículas permanecen en la cámara de corte hasta que alcanzan un tamaño lo suficientemente pequeño como para pasar a través de los orificios de la malla. Cambiando el tamiz a uno con un diámetro de orificio diferente, es posible ajustar el tamaño de las partículas generadas en solo unos minutos, permitiendo modificar el nivel de seguridad desde P3 hasta P7. Además, es necesario un sistema de extracción para transportar las partículas a través del tamiz hacia una bolsa de recolección, un contenedor de prensa o una prensa de briquetas. Los desintegradores Intimus se destacan por su baja vibración a altas velocidades, distribución uniforme de la carga y bajo consumo energético.
¿Cómo funciona un desintegrador?
Un desintegrador funciona mediante un proceso de trituración avanzado diseñado para reducir materiales a partículas muy pequeñas, asegurando así un alto nivel de destrucción. Aquí te explico el funcionamiento básico:
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Alimentación del material: El material a desintegrar, como papel, discos ópticos o plásticos, se introduce en la máquina a través de una tolva situada en la parte superior.
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Cámara de trituración: Dentro de la cámara de trituración, el material es cortado entre cuchillas rotatorias montadas en un rotor que gira a alta velocidad y cuchillas fijas instaladas en el estator. Este mecanismo de corte es similar al de unas tijeras, donde el material es reducido en tamaño con cada rotación.
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Pantalla perforada: Debajo del rotor se encuentra una pantalla perforada o tamiz, que determina el tamaño final de las partículas. El material cortado se queda en la cámara de trituración hasta que las partículas son lo suficientemente pequeñas para pasar a través de los orificios del tamiz.
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Ajuste del tamaño de las partículas: Cambiando la pantalla perforada por una con orificios de diferente tamaño, se puede ajustar el tamaño de las partículas producidas, lo que permite configurar el nivel de seguridad de la destrucción. Esto facilita la variación del nivel de seguridad desde P3 hasta P7, según sea necesario.
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Extracción del material triturado: Un sistema de extracción se encarga de transportar las partículas a través del tamiz hacia un contenedor de recolección, una prensa de briquetas o una bolsa, dependiendo del diseño del desintegrador. Esto asegura que las partículas destruidas sean manejadas de manera eficiente y segura.
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Baja vibración y eficiencia energética: Los desintegradores están diseñados para operar a alta velocidad con bajas vibraciones y un consumo de energía eficiente, lo que mejora su rendimiento y durabilidad.
Este proceso asegura que el material destruido sea irreconocible y cumpla con los más altos estándares de seguridad, siendo ideal para aplicaciones que requieren la destrucción de información altamente sensible.